El servicio Street View de Google, que nos permite navegar por las calles de cualquier ciudad como si realmente estuviéramos allí, podría servirle a la empresa como una buena plataforma para mostrar anuncios en tiempo real.
La clave reside en una patente de la empresa en la que describe un sistema por el cual el contenido de los carteles publicitarios fotografiados por el coche de Google es reemplazado por imágenes animadas mostrando anuncios reales y actuales. De este modo Google hace carambola: aprovecha al máximo el servicio Street View y encuentra un nuevo modo de hacer publicidad según la localización del anuncio.
